¡Cómo disfrutamos todos con esta visita!
Para él, suponemos fue un día duro porque estuvo todas las horas de la mañana con nosotros, de 1º a 6º y en ningún momento percibimos que se mostrara cansado; al contrario, ¡Menuda energía que transmitía!. Sus explicaciones, las respuestas sinceras a todas nuestras preguntas, el amor a los libros y a la lectura, sus historias y cuentos rimados y los muchos recursos que tiene para mantenernos siempre atentos, hicieron que cada grupo de los que pasamos por el salón de actos nos costara marchar.
Todos aprendimos algo de este encuentro. Nos contó cosas con el corazón que transmitían grandes valores sobre la igualdad, el respeto, el valor de una sonrisa, la escucha,… con un lenguaje fresco y atractivo que si ya nos han gustado en los libros que de él este trimestre hemos leído… ahora, que también lo hemos conocido en persona, todavía más.
Le gustó nuestro colegio, la biblioteca con tantos libros y autores que a él también le encantan, como nuestro admirado Roald Dahl; le gustaron el montón de preguntas interesantes que sobre sus libros le hicimos y le gustó que participáramos de una forma divertida y activa cuando nos contaba cuentos de versiones diferentes a como los conocemos nosotros: el de La Bella Durmiente, Los animales que se querían comer a otros animales, los finales que le propusimos para su nuevo libro del esqueleto Anacleto, o las divertidas historias musicadas que nos propuso sobre algunas de las letras de su libro: Canciones secretas de todas las letras y la historia de la letra T, de trompeta, por ejemplo; le gustó que le cantáramos El Rap de Roald Dahl, etc. También se fue contento.
Vuelve cuando quieras Rafael, siempre te esperaremos encantados.
Además, nos dedicó y firmó los libros que todos le llevamos. Qué majo!